Últimamente, las carillas dentales se han popularizado, especialmente, entre famosos y famosas. Las carillas dentales recubren los dientes para disimular los separados, los pequeños o los torcidos.
No obstante, no sirven para sustituir ninguna pieza ni para corregirla. Sino que es un tratamiento puramente estético y que sirve como disimulador.
Exactamente, consisten en pegar unas pequeñas láminas de un grosor de entre 0,8 y 1,5 milímetros sobre la cara externa del diente.
¿Qué tipos de carillas dentales hay?
- Composite. Estas tienen el precio más económico, pero son menos resistentes. De esta manera, hay dos formas de aplicar estas carillas:
- Directamente moldearlas sobre el diente. Es más rápido y económico, pero requiere mantenimiento.
- Componeer. Estas se prefabrican y, luego, se colocan. Son muy finas, más estéticas y su precio sigue siendo inferior a las de porcelana.
- Porcelana. Son las de mayor calidad, no necesitan mantenimiento por parte del dentista o muy poco. También hay varios tipos:
- Carillas clásicas. Estas son creadas en un laboratorio y se colocan sobre el diente tras su preparación. Tienen mayor durabilidad y un color y brillo más natural.
- Lumineers, son mucho más finas que las anteriores. Por ello, el aspecto es el más natural posible. Sin embargo, son las más caras.
No dudes en ponerte en contacto con nuestros dentistas para resolver cualquier duda. En Almidental, diseñamos tu sonrisa.